Continúa el escándalo por las vacunas sobrantes. La publicación, a finales de enero, que miembros del Consejo de Gobierno del CST se vacunaron, saltándose el orden, en el Hospital de Terrassa sigue sin desmentirse. El acceso a las vacunas, tan crítico en el momento en que nos encontramos, no puede responder a favoritismos y tiene que ser bajo los más estrictos criterios epidemiológicos.
En la pasada Junta de Portavoces extraordinaria, del 16 de abril, el equipo de gobierno no informó adecuadamente sobre la presunta vacunación irregular. Los concejales de gobierno se escudaron en el informe del CST, sin firmar, donde se asegura que no puede facilitarse la información por culpa de la Ley de Protección de Datos. Además, según Armengol, portavoz de los socialistas, “el Alcalde Jordi Ballart excusó su presencia a pesar de ser el Vicepresidente del CST y Presidente de la Junta de Portavoces, rehuyendo sus responsabilidades”.
Es por eso que el PSC y Ciutadans han reclamado la celebración de un Pleno extraordinario, que se celebrará el próximo 30 de abril, donde según González, portavoz de Ciutadans, “el Presidente del CST y el Alcalde tienen la oportunidad de dar explicaciones de una vez por todas” y así aclarar si algún miembro, exmiembro o familiar del Consejo de Gobierno del CST se han saltado el plan de vacunación aprovechándose de su cargo.